Primero la Patria

Y dale alegría, alegría a mi corazón

Sencillamente volvemos a ver una y otra vez las imágenes (la que dan por la TV pero mas las que guardamos en nuestras retinas) y no podemos dejar de sentir un cúmulo de sentimientos que (aunque suene cursi) resultan hermosos y avasallantes.

Lo primero que se nos ocurre es decir que estamos contentos. Felices de hallarnos dando pelea en (y con los que nos encontramos de) este lado de la Historia.

Se nos han caído las lágrimas y nos sentimos agraciados de que así fuera.

Desde que el jueves vimos llegar a los/as hermanos/as de los Pueblos Originarios (pasando por el turno de la desconcentración ya entrada la madrugada del miércoles 26 de Mayo) que parecemos atrapados por un amor que no conoce otro momento tan maravilloso como el que estamos viviendo; e imitando a Silvio en su canción “Serenata diurna”, le pedimos en este día perdón a los muertos de nuestra felicidad, por esta bocanada de aire luego de tanto sufrimiento.

Le pedimos perdón a nuestros muertos, a Ramón Gomez, a Rodolfo y Vicky Walsh, a la familia Oesterheld, a Gastón Riva, al “Pocho” Lepratti, a Felipe Vallese, a la familia Ovejero, al coronel Manuel Dorrego, a los de la “Patagonia Rebelde”, al padre Mujica, a Arbolito, a Azucena Villaflor, a Fermín y Lucia, a la “Gabi”, al general Perón, a la Eva, a Darío, a Maxi, y a tantos otros; porque gracias a que ellos y ellas sí supieron abrazarnos a tiempo, pudimos respirar, ver, sentir, tocar y vivir la felicidad del Pueblo en las calles.

Allá de aquellos que andan diciendo que se veía triste a la gente: habrán ido a alguna plaza griega, no se atrevieron a observar lo que ocurría después de la alfombra roja del Teatro Colon, o sencillamente nunca pisaron siquiera la vereda de su lujosa casa durante Diciembre de 2001.

Allá de los que se ven forzados a buscarle la quinta pata al gato por no haberse permitido compartir los festejos con el Pueblo del que dicen ser su vanguardia revolucionaria.

A nosotros (y a los que con gusto son parte de este sentimiento) no se nos borra la sonrisa de la cara ni la algarabía del pecho porque unos cuantos facinerosos se pongan a discutir si esta bien o esta mal que la Argentina hecha mujer sobrevuele por encima de las cabezas como una “descocada”, o donde estaban escondidos los choripanes y la “coca” que convocaran a tanta gente.

Los azules y colorados de estos tiempos podrán negar todo lo que hasta aquí se ha hecho, pero no pueden negarle a este Gobierno el merito de haber instalado la discusión política otra vez en “la masa”.

Los azules y colorados post-modernos podrán acusarnos de ser militantes rentados por algún funcionario bigotudo que con “la labia les pasa el trapo”, e incluso decir que llevamos a los compañeros y las compañeras a anotarse para cobrar la asignación Universal por Hijo/a para de esa manera beneficiar a “cafishios, quinieleros y punteros”; sin embargo, cada uno de los que somos y nos parecemos en esta lucha diaria que es el Peronismo Revolucionario, venimos desde hace muchísimo antes que el Compañero Néstor Kirchner llegue al Gobierno en 2003, bregando, rompiéndonos los cuernos, e incluso discutiendo hasta en la cola del supermercado por el reconocimiento de los derechos de los Pueblos Originarios, por la bendita integración latinoamericana, por un Proyecto de País en el que podamos soñar y hacer realidad nuestros sueños todos y todas los que hace siglos hemos sido empujados al fuego, y por una Patria justa, libre, y soberana: totalmente distinta a la de 1910 en la que la Sociedad Rural Argentina disfrutara de sus desigualdades (con Figueroa Alcorta y la Infanta Isabel a la cabeza): igualita, casi idéntica a la que Macri, De Narváez, Mirtha Legrand, Biolcati y Magnetto pretendieron revivir en el cabildo cerrado en el que trasformaron (lo poco que queda en pie) del Teatro Colon el lunes 24 de Mayo.

Sí, estamos contentos y damos gracias a la Compañera Presidenta por haber organizado semejante festichola popular en la calle, pero también queremos agradecerle a los y las cumpas que con su tarea cotidiana (desde las organizaciones, e incluso desde Radio Nacional, la Televisión Pública, los diarios que se dejan leer, la Internet) nos facilitan elementos para que los y las militantes de base podamos salir a hacer lo que nos toca: fomentar la organización popular que nos permita avanzar en una mas justa redistribución de las riquezas, liberar a los pibes de la basura del “paco”, mantener viva la memoria, castigar a los genocidas y sus cómplices, devolver las tierras a los Pueblos Originarios, impulsar la reforma agraria, y mas, y mas.

Nosotros sentimos que festejando el Bicentenario con millones de personas en las calles (sin incidentes, sin vidrieras rotas, sin los muertos que esperaban ansiosos los de TN) en parte (aunque mas no sea en una pequeña parte) se quebró la lógica de injusticia a la que viene sometiéndonos la oligarquía agroexportadora hace mas de cien años. Y que eso se lo debemos a la Compañera Cristina Fernadez: que evidentemente algo aprendió acerca esa cosa “peroncha” de movilizar a las masas.

La crispación a la que tanto hiciera mención la corporación mediática en los días previos al 25 de Mayo, la dejamos para que los “analistas de sistemas” de azules y colorados la discutan en el programa de Chiche Gelblung o en el del gordo” Lanata.

¡VIVA LA PATRIA!

“VOLVERE Y SERE MILLONES”

Eva Perón

AGRUPACION NORMA ARROSTITO
Nacional, Popular e Indigenista
"¡unidos somos fuertes, organizados somos invencibles!"
U.B Fernando Abal Medina
Convención 686 -haedo-
4-659-3458
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