Hoy perdimos con un equipo frío y calculador.
Juego al futbol (o “a la pelota”, como decíamos en el barrio: donde se aprende la esencia del folclore futbolístico, y si alguno no lo entiende le pido disculpas porque esas cosas no se pueden enseñar en una enciclopedia, se aprenden ahí, en el potrero), pero como decía, juego a la pelota, y se que teníamos 90 minutos para ganar, que era a matar o morir, y que así tiene que ser.
Sin embargo yo no quería que “muriéramos” y ahora que nos toco perder, no puedo negar la amargura y tristeza que tengo por eso.
Si tengo que decir algo sobre los partidos es que no se merecen, el que hace mas goles gana y se acabo por mucho que me pese, así como me peso observar la cara de mi hijo cuando terminaba el partido, y me veía desahuciado y desconsolado, compartiendo esa “sensación” con la camiseta de argentina puesta, y diciéndome que no se la iba quitar por la derrota.
Puse una película que no tenga nada QUE VER CON FUTBOL, no quise escuchar a esos que viven del “foul”, que dirigen con el resultado puesto, y/o que nunca jugaron a la pelota (y si jugaban los elegían últimos justamente porque eran los dueños de la “redonda” y por muy “madera” que fueran había que elegirlos igual, sino no jugaba ninguno).
Me dirán resentido y hasta por ahí tengan razón. Soy uno de los tantos “resentidos” que quisiéramos ser “el Diego” para poder decir esas cosas que a los poderosos no les gusta escuchar; porque eso es el Pueblo Argentino: un Carlitos Tevez que en cada pelota se juega la vida y que por eso genera el cariño que genera. Lo que todos vemos (hasta los que no lo quieran ver, pero que no pueden seguir haciéndose “los giles”): que el futbol tiene esa cosa linda que es como la revancha de la guerra de las Malvinas y la mano de D10S: meterla fantasía a los europeos fríos y calculadores.
Hoy termine jugando “al loco” con mi hijo, feliz de que entre el Mundial, Diegote y los muchachos, le han metido el incentivo al pibe mío (como a tantos otros) para seguir sacando generaciones de campeones que defenderán la celeste y blanca; así que mañana, cuando salga a laburar, voy a poner la bandera en el auto para que todos la vean, con la foto “del Diego”.
Para toda la gilada (que seguro saldrá a pegarle y armar puterío) le dedico dos frases que no son mías, sino del mas grande, y cada cual asuma la que le cabe: “Yo me equivoque y pagué…pero la pelota no se mancha”
Y para los que nunca van a entenderlo a Maradona ni a nosotros (sea porque le besen el culo a la vieja puta de Clarín, porque crean que el “fulbo” es el opio de los pueblos, o por el motivo que sea) pueden adoptar esta que les sentara muy bien: “Con perdón de las damas, QUE LA SIGAN MAMANDO”
¡VAMO ARGENTINA!
AGUANTE DIEGO Y LOS MUCHACHOS
Nacional, Popular e Indigenista
"¡unidos somos fuertes, organizados somos invencibles!"
U.B Fernando Abal Medina
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